He aprendido hablar por señas.
Tragarme las espinas
Sonreír a mandíbula abierta
Por cualquier intolerancia
Quizás ya nunca vengan a avisarme
Para ser testigo de mi ejecución.
Y caeré en la paila
Pasando a ser manjar del tumulto
De olas
Voraces y profundas
Me he cansado de luchar
Por los colores
Porque la generosidad del sol
Ilumine la parte más hermosa
No tengo tantas manchas
Como pregonan los usurpadores
Ni creo morder ni aruñar
Y si lo hago
Siempre será en defensa
Del amuleto
Que me obsequian
Porque no existe otra
Ventisca que merezca
En este decursar
Entre aves de rapiña
Y faranduleros con neuronas
Enchapadas.
Del sonrojo de las mejillas
De este malestar
De tragarme la píldora
Abatida por el aburrimiento
De tantas noches de brujas y hechiceros
Encaprichados en sabotear mi origen
Tan solo porque lancé al viento
Mi verdad
Mi pureza
Esa que por mucho que hagas
No podrás enturbiarla.
Tragarme las espinas
Sonreír a mandíbula abierta
Por cualquier intolerancia
Quizás ya nunca vengan a avisarme
Para ser testigo de mi ejecución.
Y caeré en la paila
Pasando a ser manjar del tumulto
De olas
Voraces y profundas
Me he cansado de luchar
Por los colores
Porque la generosidad del sol
Ilumine la parte más hermosa
No tengo tantas manchas
Como pregonan los usurpadores
Ni creo morder ni aruñar
Y si lo hago
Siempre será en defensa
Del amuleto
Que me obsequian
Porque no existe otra
Ventisca que merezca
En este decursar
Entre aves de rapiña
Y faranduleros con neuronas
Enchapadas.
Del sonrojo de las mejillas
De este malestar
De tragarme la píldora
Abatida por el aburrimiento
De tantas noches de brujas y hechiceros
Encaprichados en sabotear mi origen
Tan solo porque lancé al viento
Mi verdad
Mi pureza
Esa que por mucho que hagas
No podrás enturbiarla.