Mi
único afán no es seducirte
Verte
expuesto
Dentro
de mi yo
Ni
siquiera persigo
Comerte
las entrañas
Cuando
siento este deseo
Perdurable
Turbando
la razón
A
dentelladas
Hay
mucho más
Rozando
la lujuria vespertina
Un
qué se yo
Metido
entre las cejas
Que
me pierde y me salva
Quiero
salir a flote
De
esta fiebre quinceañera
Regresar
a mis años
Maduros
y aun fragantes
Sin
que el deseo se nos quede nulo
Quiero
respirar tu calor borrascoso
Beber
de un sorbo tu boca inmaculada
A
la vez que tus manos me rindan
Atracarme
en tu mástil
Nadar
entre tu sed
Llegar
a las profundidades
Donde
amanecen los topacios
Iluminados
por la luz
De
nuestros ojos
Llenos
de libido y pasión eréctil
Y
allí hacerte sentir
El
amor a mi manera