Qué tú…
Tan sencillo y escuálido
Ibas a ser historia
Y aunque por amarte
He perdido el paraíso
Sigo llamándote a gritos
Anhelando sentir tus varoniles movimientos
Tu boca en viaje interior…
Y más que todo eso
Tus ojos de arco iris y llama
Como la única voz que calme mi silencio