Ven
Conoce los secretos de mis poros
El deseo que tiene tu mirada
Cuando exhaustos atravesamos
La rosa de los vientos
E irradiamos goce
Sin prejuicios
Ni fronteras góticas
Descubre que
Me gusta tu peso embravecido
Las islas que encuentro
En cada rinconcito
Los diques que se abren al son
De mis caricias
La brújula de tus manos
Describiendo mi mejor sensación
Nuestros cuerpos sin lenguajes triviales
Los dos como astros circulando
En la órbita de nuestro lecho
Cuando caigo de bruces sin sospechar
Que me voy extendiendo
Hasta hacerte penetrar al laberinto.
No sabes amor
Como me estremezco cuando tus bramidos
No encuentran el punto exacto.
Y te veo sin rumbo a tientas
Hasta despertar sin escrúpulos
Todos los nenúfares de mi lago
Acaríciame con tus manos
Al mismo centro
Sumérgete y sumérgeme
Dentro de tu olor a sales vírgenes
Vuélvete un maremoto
Arrasador y tibio
Instálate sin prisa
Para que puedas morder y morder
La manzana