Por: Adela Soto Alvarez
Disculpa
Mi sensibilidad
Constante
Indefinida
y esta huella superflua
que sale a la hora imprecisa.
Disculpa mis entregas fortuitas
Sin medir prejuicios ni maneras.
Y esta forma de absorberte
Descarriando principios
Devorándote impuro
Hasta la misma llama.
Disculpa que sea tuya
A pesar de la distancia
A pesar del cúmulo de encuentros imaginarios
A pesar de solamente poseerte
En gemidos
Distantes
Y atroces
A pesar de no poder palpar tu cuerpo incólume
Tu boca de marfil, casi perfecta