ANTE TANTOS COMETNARIOS SOBRE LA CIUDADANA BLOGUERAPor : Guido F Castellanos.
Adela, te felicito por tu excelente artículo. Aplaudo tu valentía al lanzar al ciberespacio un escrito que está revolviendo el hormiguero de aduladores de la bloguera habanera. Admiro tu profesionalismo, lucidez y mesura al exponer verdades tan espinosas, controversiales y a su vez tan necesarias en nuestro medio, por lo que muy pocos se han atrevido a abordarlas para el público lector.
Parte importante de la labor del auténtico periodista es cuestionarlo todo. Y tú has realizado tu labor como tal.
Yo no seré tan condescendiente con algunos de los injustos y despiadados comentarios que aparecen, tanto aquí como en Generación Y, en torno a tu artículo.
La verdad de tus cuestionamientos y argumentos ha sido una bofetada estentórea al ciego fanatismo y a la intolerancia sectaria de cierto grupejo de sujetos que se han consagrado a levantarle un altar al “la ciudadana bloguera”.
Todos los comentarios negativos provienen de varios mentecatos que se congregan a diario en el solar del chachareo y la chismografía del blog Generación Y, a donde acuden a ventilar sus frustraciones y a insultarse unos a otros, particularmente a todo el que tenga el valor de expresar una opinión contraria a la establecida y grabada en piedra por su clan.
Son como pindongas que siempre están aprendiendo, pero nunca llegan al conocimiento de la verdad.
A estos perros falderos jamás se les ha ocurrido ni una sola idea original. No serían capaces, ni aunque se lo propusieran todos juntos, de escribir un buen artículo y muchísimo menos poemas, libros y estudios serios y concienzudos como los que has escrito tú durante décadas.
Todo esto requiere no sólo talento, imaginación y amplios conocimientos, sino autodisciplina y continua laboriosidad, virtudes ajenas por completo a estos pusilánimes gárrulos, envalentonados por la impersonalidad y la anonimidad de la Internet, quienes no pueden aspirar a mayor galardón que la mediocridad.
No le prestes atención a las acusaciones y a los exabruptos de estos ignorantes fanáticos, devotos que participan en el nuevo culto a la intocable e imperecedera santa cubana, como dijera un defensor de la verdad y tuyo en el blog en cuestión, la nueva deidad cubana: Santa Yoani del Vedado.
Recuerda: maldición de burro no llega al cielo. Son más gruperos que otra cosa. Sus respuestas a tu artículo no son más que reacciones mecánicas, como las de un resorte, pues no se detienen a leer ni a pensar (la materia gris no les alcanza para tanto) antes de tomar la decisión de responder.
De todas formas, su capacidad de raciocinio es en extremo limitada, como la de todo fanático adulador.Y ¿cuales son los argumentos que lanzan para defender su adherencia, su fanatismo en torno a la bloguera habanera?
Afirman dogmáticamente que todo el que cuestiona su integridad y la de su espectáculo cibernético, o que se atreva a pronunciar siquiera alguna palabra negativa en torno a los mismos, lo hace por odio, envidia o porque es un agente del gobierno castrista. Y preguntamos, ¿por qué habrá de tenerle odio o envidia a la bloguera y su blog una persona como Adela y, por qué no decirlo, cualquier otra persona?
¿Conocen estos mamelucos la obra y la trayectoria de Adela Soto Álvarez? ¿Saben ellos que Adela ha publicado varios poemarios, novelas, cuentos, artículos, investigaciones, etc., y ha sido guionista? ¿Conocen estos intolerantes adulones la labor realizada por Adela dentro de Cuba por la libertad?
¿Se han enterado de sus tribulaciones dentro de la isla por su postura contestataria? ¿Han leído acerca de su encarcelamiento domiciliario y, en fin, de tantas otras cosas que pasó en la isla esclava por su oposición al régimen y su lucha por la libertad de expresión y de toda índole?
Preguntamos ahora, ¿dónde está la obra literaria de la bloguera habanera? No existe. ¿Dónde está la labor periodística que la acredita? No la hay. ¿Y su trayectoria en la lucha por la libertad de Cuba?
Para muchos puede ser admirable e incluso encomiable la labor que está realizando a través del blog, pero esto no tiene comparación, no sólo con la obra literaria, la labor, la lucha por la libertad y la trayectoria de Adela Soto Álvarez, sino tampoco con la de tantos luchadores, disidentes, presos políticos y mártires cubanos de los últimos cincuenta años.
En el colmo de la ceguera, el empecinamiento, el fanatismo y la complicidad incondicional con la “nueva escobita”, una de las fanáticas, con evidente fervor, afirmó en el blog que “seguiría apoyándola aunque perteneciera al G2”.
Asegura la turba aduladora que la inteligencia de la bloguera es la que los tiene fascinados, la que los ha atrapado a todos. Bien. No dudamos que sea inteligente. No obstante, esto no es motivo para rendirle pleitesía a nadie.
Parece que estos fieles adoradores conocen a tan pocas personas inteligentes que se dejan cautivar por la primera que se les atraviesa en el camino. La bloguera se para sobre el muro del Malecón en pleno disfrute de su popularidad y sorprendida por los fieles que de los cuatro vientos la elogian, la felicitan, la veneran.
Los deslumbrados gruperos se arremolinan a su alrededor entrando a su espacio cibernético, desde tierras lejanas y no tan lejanas. La nueva deidad cubana, Santa Yaoni del Vedado, como ha hecho habitualmente durante más de dos años, se dirige a sus devotos adoradores una vez más.
Los fieles del nuevo culto, enternecidos, boquiabiertos, leen sus palabras y se escuchan sólo interjecciones de admiración, expresiones reverenciales y cantos de júbilo por la nueva revelación de la santa de la realidad cubana.
Cada miembro del nuevo culto coloca su mano derecha abierta sobre la pantalla iluminada de la computadora, donde aparece la imagen de la santa bloguera, y le reitera su fidelidad incondicional y su devoción; todos le reiteran exaltados:
“Aun si pertenecieras del partido y trabajaras para el G2 te seguiríamos hasta el fin. Y todos, ahora de pie, a una voz exclaman: ¡Amén!
El profeta habla sobre la ciudadana bloguera
La ciudadana bloguera se para sobre el muro del Malecón en pleno disfrute de su popularidad y a su vez atónita por tantos fieles que de los cuatro vientos la elogian, la felicitan y la veneran.
Los deslumbrados y fervientes gruperos se arremolinan a su alrededor entrando a su blog en el espacio cibernético, que pronto habrá de convertirse en una nueva Cuba, en una Isla Virtual, a la que podrán irse a vivir todos sus fieles seguidores, provenientes de tierras lejanas y no tan lejanas.
La nueva deidad cubana, Santa Yoani del Vedado, como ha hecho habitualmente durante más de dos años, se dirige a sus devotos adoradores una vez más.
Los fieles del nuevo culto, enternecidos, boquiabiertos, leen su alocución y se escuchan sólo interjecciones de admiración, expresiones reverenciales y cantos de júbilo por la nueva revelación tocante a la realidad cubana y sobre la ciudadanía en la Isla Virtual, en la que todos los fieles vivirán en perpetuas libertad, paz y prosperidad.
Cada miembro del nuevo culto abre su mano derecha y la coloca sobre la pantalla iluminada de la computadora- donde, refulgente y todo color, aparece la imagen de la santa bloguera- y le reitera su fidelidad incondicional y su devoción; todos le repiten exaltados:
“Aun si pertenecieras al partido y trabajaras para el G2 te seguiríamos hasta el fin. Y todos, ahora de pie, a una voz exclaman: ¡Amén!
Guido F. Castellanos
gfcastellanos/wordpress.com
