DOLOR
Por Adela Soto Alvarez
Un dolor precordial suena como relámpago
Y corro a los brazos del buitre más cercano
Sin advertir su ponzoña
Ni sus dientes malévolos
Pero recurro a él como única salida
En este reino grande
Que me sabe a selva cotidiana
Me brinda sus antídotos
Y un tenaz desayuno
Me remienda las grietas
Y luego me almacena
Entre sus bagatelas
Sin ver como mis días
Se vuelven hojas secas
Para el convoy de paso
Sin ver como anochecen
Mis ojos en la espera.
Un dolor precordial suena como relámpago
Y corro a los brazos del buitre más cercano
Sin advertir su ponzoña
Ni sus dientes malévolos
Pero recurro a él como única salida
En este reino grande
Que me sabe a selva cotidiana
Me brinda sus antídotos
Y un tenaz desayuno
Me remienda las grietas
Y luego me almacena
Entre sus bagatelas
Sin ver como mis días
Se vuelven hojas secas
Para el convoy de paso
Sin ver como anochecen
Mis ojos en la espera.