Te busco en mi aposento
Te llamo
Con voz desesperada
Y sólo logro rescatar recuerdos
Entre las partículas
Que forman mi cerebro
Aturdido y sonámbulo
Tú nunca sabrás de este lamento
Que surge entre mis nervios
Como daga incansable
Me dueles
Y vives desarmando mis horas
Entre el por qué
Y el miedo
De que te hagas de viento
Si supieras
Como persiste
Tu risa contagiosa
Tu piel fantástica y suave
Te busco incansable
En cada día
En cada madrugada
En mis pupilas
Con sabor
A lejanía
Y a destiempo.
Si oyeras mi llamado
Aunque fuera el susurro
Que permanece virgen
Si volvieras
Con tus manos de seda
Siempre alertas
Pero todo permanece
Inmutable
Como adiós sin vuelta
Desde que te marchaste
Paso las horas
Hilvanando tú nombre
Me he vuelto navegante
De lágrimas inmensas
Suelto las amarras
Y te veo sediento
Saciándote en mis aguas
Mientras muero de cólera
Por no tenerte cerca
Añoro tu regreso
La fuerza de tu fuerza
El amor que me diste
Y no supe
Retenerlo