Fuiste mí romance de verano
Cálido, tierno,
Lleno de no me olvides
Prendidos a la solapa
Magistral
Y a la medida
Sin nebulosas al amanecer
Ni rincones prohibidos
A la hora de la total entrega
Tampoco hubo trampas
Y llegó la hora de tocarnos la piel
Por dentro y por fuera
Conocer si éramos paralelos
O simplemente
Paso ceremonioso
Ante la insistencia del sortilegio
Nunca lleve armadura
Tú si
Cerrada hasta la cava superior
Con el objetivo de que no se filtrara
Ni un solo gesto espiritual
Aun así surgió el único encuentro
Dentro de mí
Gritaban anhelos desbordantes
Dentro de ti verdugos de turno
Hasta convertirnos en dos seres extraviados
Que no necesitabas la misma claridad