Un haz de luz fue el único amuleto
Que quedó
Y aunque reconozco que aun duele
Tu repentino cambio
Es de mujer aceptar decisiones
Y no implorar migajas
De todas formas eras
Sólo una costumbre pasajera
Que cualquier palabra la repone
Por eso
Quédate con el sol que te llevaste
Aun me queda calor y un buitre manso
Que permite me acurruque bajo su ala
También me quedan noches y deseos
Para reconquistar el tiempo muerto
El mástil de un naufragio
Algunas imágenes confusas
Un moledor de sueños
Y las cuerdas de una muchacha rota