Por Adela Soto Alvarez
Nuevamente la autoestima desgarrada
Sin atesorar ni una migaja
Encerrada entre barrotes
Esta vez más oscuros
Más llenos de estiércol y pesadumbre
Nuevamente la autoestima desgarrada
Sin atesorar ni una migaja
Encerrada entre barrotes
Esta vez más oscuros
Más llenos de estiércol y pesadumbre
El dolor duele
Duele como nunca
El pecho se inflama y estalla contra el muro
Es un muro relleno de más estiércol
Más lleno de ese dolor que más me duele
Yo la valiente mujer que enfrentó su destino
El arpón y el latigazo
Estoy en casa sin casa
En medio de la nada y la resaca
De todo lo que di
De todo lo que sembré
Germinó la espina
Siento un asco infinito
Y me aferro sin uñas
Pero la luz no existe
No existe ese final del tubo
Ni la posibilidad de entrar por otro lado
Estoy ácida
Mi corazón es un hervidero
Y mi cerebro un tumulto
Y mi cerebro un tumulto
Cuánto me duele ese dolor que más me duele
Ese dolor impreciso
Que perdura por siglos
Ese dolor que más me duele
Este dolor tan hondo
El dolor de mi patria en cautiverio.