Nuevamente en Macondo
Sin el pergamino de la suerte
Donde poder soltar mis alas torpes
Nuevamente sin dados
En una madrugada de cenizas
Con olor a hierba seca
Ligada
Confusa
Semi-Ardiente
Pero sin un as de basto
Para mi endeble posición plebeya
Nuevamente con hambre
Y sed
Sed y hambre
Y los huesos sulfatados
Inherentes
Sin vestigios
Más que huesos
Más que cuencas absolutas
Más que el cruel mutismo
Que sabotea mis puntos cardinales.
Nuevamente sabiéndote ahí
A pocos pasos
Despierto
Con ganas de arrasar mis voluntades
De lamer de un sorbo
Hasta la última fibra de mi espasmo
Nuevamente hundida
En este ir y venir de caracolas
Donde saltan los orígenes
Y embotellan la calma
¿Qué será de mi cuerpo incólume
De tu cuerpo sin ruidos
De estas palabras sordas
De la distancia atroz que nos confunde?