Tus ojos redondos se emboscan en mi silencio
Acaparan toda mi ternura
Y escucho como ruge la realidad
Llenando de lagunas mi frágil coraza
Así me afano en recordar el día del encuentro
Aunque me sepa insípido
Pero es imposible negar
Que a pesar de todo
Mis barcos se encallaron
Mientras tus viejas concepciones
Comenzaron a soltarme las amarras
Hoy vago como materia mutante
Huyendo del desdén concéntrico
Que tanta fragilidad me deja