Una hora más
entre decepción y fango
Amigos prendidos con alfileres
Cambios a
granel
De espíritu
y patrimonio
Y el
mundo perdiendo la pubertad
Horrores
perturbando la fe
Enemigos convertidos
en héroes
Mientras las
lenguas virulentas
Degüellan
la parte más intocable
Siento un
ir y venir de marionetas
Con afán de
elocuencia
Penetrando apaciblemente
Hasta el último
rincón
Pero nadie
advierte la lluvia de maldad
Ni cómo se divíde la
época
Dándole
fuerza
A la
barbarie callejera
E inoculándole
desespero
A la otra
mitad
Unos se
aferran a lo que se pregona
Otros pregonan
ápices de su verdad
Con el afán
de ir matando la esperanza
Con tanta confusión
y pánico.
Tal vez
llegue la hora
Tal vez no
llegue
Pero estamos
a punto
De encontrar
El eslabón
Regrese
la época de los milagros
A esta catástrofe
de ignominia
Que va
lentamente
Dejándonos sin
paradero.