El rostro cataléptico
La boca en patética
burla
Y un triste sinsabor
cubre tus manos
A lo lejos el mar
Las olas amarillas,
azules y violetas
Arrastran cangrejos y
batracios
Cantan las sirenas
Su letrilla de
soledad
Y el sol prepara su
tumba
Flores negras a
granel
Comienzan a crecer
como espirales
Mientras tu vociferas
Que el aura se te
ensucia
Siento miedo de ti
De mí
De alcoholizarnos
Con la lluvia que
anuncian
Las paredes
Quiero pronunciar una
palabra
Tal vez dos
Besarte en la mejilla
Proferir una frase
Pero tus ojos me
miran
Nauseabundos
Y no puedo hacer más
Que silenciarme
Saber que estás ahí
Pero no estas
Saber que eres de
piedra
Y que no existes.