DEL LIBRO
"LOS RINCONES DEL SILENCIO"
CUBA-2003
Este poemario se escribió en abril del 2003 posterior a la ola represiva del 18 de marzo del mismo año. Consta con 75 poemas dedicados a los prisioneros políticos y de conciencia.
Autor: Adela Soto Álvarez.
Un millón de cabezas cada noche
Y al otro día más inocentes
Que un conductor en las estación de trenes…
Heberto Padillas…
A OSCAR ELIAS BICET.
Los verdugos no saben que a pesar de las rejas
Existen rincones humildes
pero claros
donde el derecho
el deber
y la conciencia
encuentran su respiro
No saben que puede caer la vida ruidosamente
o gota a gota deslizarse
pero al final abre las alas
Todo tiene su precio y su peligro
su cuota de pesares
sus atributos
Pero una herida abierta en la conciencia
puede agitar la brújula
y sacudir vivos y muertos
Los verdugos no saben
Que hay ideas que cuando se levantan
se vuelven misiles
testimonios
incluso pavimentan
y como un gran relámpago
escriben libertad sobre la tierra.
A RAUL RIVERO.
Tratan de matar al prisionero
Silenciar su lengua de arropar acertijos
Acosarle el crepúsculo y la aurora
Hasta la más leve metáfora que surja
Y mientras observo las esquirlas
Y el frío artificial
Muero de sobredosis de impotencia
Con el cuerpo invicto
Por eso te suplico amigo
Que no mueras del todo
No olvides que las cuerdas aunque fuertes
Tambalean
Tampoco alces el índice
Ni hurgues los enigmas
Dios nos escuchará
CUBA-2003
Este poemario se escribió en abril del 2003 posterior a la ola represiva del 18 de marzo del mismo año. Consta con 75 poemas dedicados a los prisioneros políticos y de conciencia.
Autor: Adela Soto Álvarez.
Un millón de cabezas cada noche
Y al otro día más inocentes
Que un conductor en las estación de trenes…
Heberto Padillas…
A OSCAR ELIAS BICET.
Los verdugos no saben que a pesar de las rejas
Existen rincones humildes
pero claros
donde el derecho
el deber
y la conciencia
encuentran su respiro
No saben que puede caer la vida ruidosamente
o gota a gota deslizarse
pero al final abre las alas
Todo tiene su precio y su peligro
su cuota de pesares
sus atributos
Pero una herida abierta en la conciencia
puede agitar la brújula
y sacudir vivos y muertos
Los verdugos no saben
Que hay ideas que cuando se levantan
se vuelven misiles
testimonios
incluso pavimentan
y como un gran relámpago
escriben libertad sobre la tierra.
A RAUL RIVERO.
Tratan de matar al prisionero
Silenciar su lengua de arropar acertijos
Acosarle el crepúsculo y la aurora
Hasta la más leve metáfora que surja
Y mientras observo las esquirlas
Y el frío artificial
Muero de sobredosis de impotencia
Con el cuerpo invicto
Por eso te suplico amigo
Que no mueras del todo
No olvides que las cuerdas aunque fuertes
Tambalean
Tampoco alces el índice
Ni hurgues los enigmas
Dios nos escuchará
y nuestras palabras
Serán el ave fénix en nuevas multitudes
Hoy tu rostro lo veo entre imágenes difusas
Pero estoy segura
Serán el ave fénix en nuevas multitudes
Hoy tu rostro lo veo entre imágenes difusas
Pero estoy segura
que el tiempo que trascurre
No es más que extraviados eslabones
De una cadena que está a punto de extinguirse.
No es más que extraviados eslabones
De una cadena que está a punto de extinguirse.
POEMA PARA TODOS LOS PRISIONEROS.
No aceptaré tu ausencia
Ni te imagino naufrago de tantas embestidas
Mírate adentro y cuida tu valor del aguacero
Tu verdad y mi verdad el mundo la hace eco
Ya el miedo en fuga estremece los aleros
POEMA A LOS ESCRITORES ENCARCELADOS
¿Cómo puede un escritor ser silenciado
Desvanecerles el soplo
Pretender que sus ideas
Perezcan en la maldad que azota?
¿Cómo puede Raúl,
Vázquez,
Ricardo
Yo misma
Muchos otros
Beber de las injurias
Y Dejar que la injusticia toque el fondo?
¿Cómo pueden creer los torpes
Que nuestra literatura reconoce fronteras?
Si somos los dueños de la historia
Y nuestra inspiración es más que profecía
Quien nos iba a decir a los poetas
Que la musa estaría encarcelada
Si nuestras alas están libres del relámpago
Si no puede existir mordaza en la palabra.
Yo misma
Muchos otros
Beber de las injurias
Y Dejar que la injusticia toque el fondo?
¿Cómo pueden creer los torpes
Que nuestra literatura reconoce fronteras?
Si somos los dueños de la historia
Y nuestra inspiración es más que profecía
Quien nos iba a decir a los poetas
Que la musa estaría encarcelada
Si nuestras alas están libres del relámpago
Si no puede existir mordaza en la palabra.
A OMAR RODRIGUEZ SALUDES
Pienso en tus pies taladrando los pisos
cobijados bajo la negra luz que no se agota
Los tigres desbocados queriendo con los dientes
vengarte las distancias
La palabra padre como eterno martillo
el estomago yerto
y los ojos perdidos
en tu casita en Lawtón
en Ileana tu esposa
y en los niños
llorando por tu ausencia
Y pienso y pienso
lo hago y me desboco
enterrando mis uñas en nuevas inquietudes
Entonces sin remedio
entono en Fa Mayor mi grito desagarrado
pero el cielo me escucha con extrema paciencia.
-II-
Un día Patricia saldrá a estas calles
hoy tan insomnes
heridas y golpeadas
y tejerá la luz junto a su padre
Será un placer para la historia
ver su juventud en cada rostro…
Por eso hoy pienso
en el temblor que ocuparan mis nervios
cuando su voz resuene en los cordajes invisibles
porque la injusticia no pudo salirse con la suya
Entonces conversaremos de voces crudas y afiladas
de niños huérfanos a la fuerza
del temblor de los que sí fueron culpables.
Y nos dolerá a todos aquel día de marzo
las lágrimas derramadas
las madres y las esposas
llorando por tu ausencia
Y pienso y pienso
lo hago y me desboco
enterrando mis uñas en nuevas inquietudes
Entonces sin remedio
entono en Fa Mayor mi grito desagarrado
pero el cielo me escucha con extrema paciencia.
-II-
Un día Patricia saldrá a estas calles
hoy tan insomnes
heridas y golpeadas
y tejerá la luz junto a su padre
Será un placer para la historia
ver su juventud en cada rostro…
Por eso hoy pienso
en el temblor que ocuparan mis nervios
cuando su voz resuene en los cordajes invisibles
porque la injusticia no pudo salirse con la suya
Entonces conversaremos de voces crudas y afiladas
de niños huérfanos a la fuerza
del temblor de los que sí fueron culpables.
Y nos dolerá a todos aquel día de marzo
las lágrimas derramadas
las madres y las esposas
asignadas
a botas de siete leguas
Y no por la carencia de verdades centrales
Sino por el vía crucis que imponen los esbirros
Ya suelta las amarras
nos sentaremos todos al son de los recuerdos
chismorrearemos sobre hechos insólitos
y amasaremos la pureza con las manos.
a botas de siete leguas
Y no por la carencia de verdades centrales
Sino por el vía crucis que imponen los esbirros
Ya suelta las amarras
nos sentaremos todos al son de los recuerdos
chismorrearemos sobre hechos insólitos
y amasaremos la pureza con las manos.