Tu amor continúa
En el atardecer
En el ocaso
Cuando la luna se me cuelga
Y me hunde
Cuando siento ese terrible miedo
De unirme a la caravana
De indiferencias
Que grita desde la oscuridad
En el pavor de abrir la puerta
Y no encontrarte
Cuando la tiniebla absoluta
Y tintineante
Se apodera de mi fragilidad
En el soplo que aún queda de tu voz
Atado a las mágicas palabras
Desprendidas al azar
En los duendes que silban en mi silencio
En las flores
Cuando me aseguran el regreso
De tus pasos
Nítidos
Cuando sé
Que no demoraras
Al escuchar mi voz
En
El siempre
Estarás ahí
Para abrigarme
De este frío
Desgarrador
Que lleva mi sensatez
A la más triste
De las fantasías