Déjenme una vez más
En este
laberinto
Que me acoge
Nadie se ha dado
cuenta
Pero solté la
pata de grulla
Y abrí las cuencas a 90 grados
Por eso descubro polizontes
Disfrazados de mendigos
Y a oportunistas
Bebiéndose el néctar de los dioses
Encumbrados en versículos
Y parábolas
Muchos pregonan
Haber llegado del oriente
Y realmente han salido de ultratumba
Coronados con peces putrefactos
Y collares de moho y mala hierba
Otros menos estúpidos
Se pavonean con discursos
De tres por kilo
Y balbucean cantos en jerga
Extraña
Sonando la lata
Para que nadie olvide
Depositar el pago
Pobre mundillo
De mamarrachos y excéntricos
Dotados de un beneficio barato
Que solo se aprende
Tras la perturbación
O la miseria humana
Déjenme una vez más
Escudriñando el agua de coco
Tal vez le entre por la raíz
O se la inyecten sonámbulos y arpías
En busca de preeminencia y lucro.