Un desastre mayor
Se empeña en
perseguirme
Lo llevo encadenado
Metido noche a
noche
Entre las cejas
Deambula en
sentimientos
He hipocondrías
Se adueña de mi
psiquis
Con olas feroces
y tiranas
Y continúo
Sin fuerzas para
huir
De tantas
palabras que me saben a orgullo
Conversación que
surjan sin fantasmas
Lanzas empuñadas
Entrecejos
fruncidos
Y este olor a
desamparo que no muere
Un desastre
mayor
Se empeña en
perseguirme
Desordena mis cosas
Lanza voces
ilusas y desarmadas
Veo la entrada
de los turcos
Como lobos
hambrientos
No soy una
elegida
Los pecados los
tengo
Recalentados
Tres ojos bizcos
me zarandean
Siento voces
agudas y rebeldes
Que vienen
de bocas alcoholizadas
Siento un miedo decano
Meterse hasta
los tuétanos
Penélope corta
flores en el prado
Odiseo las
recoge
Todos están
incoloros pero en pie
¿Y yo dónde
estoy?
Tratando de
ablandar un corazón de hierro
Con pequeñas
brazas a punto de extinguirse